Oviedo y Ceballos visitaron a los frentistas de la ex Danubio

La concejal del bloque Libres del sur, y Jorge Ceballos, quien lidera el movimiento en la Provincia de Buenos Aires, visitaron este viernes a los frentistas de la ex fábrica textil y recorrieron el lugar.

Una fuerte indignación reinaba entre los presentes al comenzar el encuentro, quienes no tardaron en solicitar a los referentes de Libres del Sur, que soliciten al municipio la reapertura de la calle Tacuarí, que hoy ocupada la ex fábrica, por para después dejar bien claro que los vecinos no quieren que se construyan edificios en el terreno que ocupaba antes la fábrica.

“La calle Tacuarí existía” aclara Tita, una de las ramenses más longevas en el barrio y recordaba: “Primero levantaron la fábrica en la manzana ubicada entre Solis (ahora Iannone) y Tacuarí, después ampliaron la fábrica sumando la otra manzana de va de Tacuarí hasta Saavedra y mientras construían, pusieron un enorme portón en el lugar que estaba la calle y se quedaron con ella”

Ilda, otra de las presentes, quien nació con la llegada de la fábrica al barrio, trabajó como operaria en ella y su padre, fue uno de los albañiles quien participó en la construcción de la misma, reclama que es más importante la voz de quienes nacieron y viven en el barrio antes que un inversor. Mientras relataba que como mucho esfuerzo siempre tuvo "todos sus impuestos al día", recuerda que guarda hasta los comprobantes del pago del asfalto de su cuadra pero que nadie tiene en cuenta a los mayores que hicieron tanto Ramos Mejía para saber que piensan al respecto.

Refiriéndose al proyecto que se pretente llevar a cabo sobre el predio de la ex fábrica Danubio, que constructor presentó el miércoles pasado en una reunión con los vecinos, Ilda denunció a la concejal: “Discriminaron las veredas de los frentistas, criticaron la fachada de mi casa que hizo mi padre con tanto esfuerzo y está perfecta. Ellos nos quieren hacer las veredas y plantar árboles para poder vender a U$s 1.400 el m2”

Otros vecinos, como Blanca, reclamaban que vienen pidiendo una audiencia al intendente, desde que Balestrini ocupaba ese cargo, por otras problemáticas del barrio, pero nunca los llamaron. Entre varias denuncias presentadas, acusan que el tramo de la calle Magallanes, entre Urquiza y Maipú, hoy aún de tierra, figura dos veces asfaltada en el municipio y la calle sigue igual.

“Los vecinos no se oponen por oponerse, quieren casas bajas, como tenemos en todas las cuadras”, interrumpe Andrea, una de las más luchadoras de la zona y se preguntó: ¿Porqué no pueden construir casas como hicieron antes con la otra manzana que pertenecía a la fábrica y que encima, le agregaron una calle? Nosotros pagamos los impuestos como zona residencial y son bien altos, no queremos edificios señores" y refiriendose a la falta de infraestructura, disparó: "Construyeron en Iannone y Urquiza cuatro departamentitos y ya tuvieron que poner cisternas porque no les sube el agua al primer piso.”

Refiriéndose a la construcción indiscriminada que se vive en la localidad, otro de los presentes, recordaba con tristeza, los chalets que se tiraron frente a la Plaza Mitre para levantar enormes torres que quitaron el sol de un “espacio verde que ya no cumple su función”. También comentaban a la edil, como por falta de una política que respete la identidad del lugar, perdieron el histórico barrio Ingles ubicado en la zona de Espora y Bolivar para dar paso a los edificios. Él como todos en la reunión, repiten que no quieren que les compren sus viviendas, sólo quieren que se respete la vocación del barrio que eligieron para vivir.

Después de escuchar los reclamos, Jorge Ceballos, aclaró que la edificación no es un problema nuevo en Ramos Mejía y expresó al respecto: “Se han construido edificios fuera de la reglamentación, sin respetar el medio ambiente. Al levantar un edificio van deteriorando el valor de los linderos y la calidad de vida. Hemos acompañado otros reclamos, ya que dañaron casas linderas, les quitaron el sol, la privacidad y Ramos Mejía no está preparada por su infraestructura”.

Refiriéndose a la ex Danubio: "Este inmueble era de una fábrica que tenía deudas con la provincia y con el municipio, fue a remate y como siempre pasa, de buenas a primeras, aparece un gran inversor privado preocupado por la vida de los argentinos y que nos quiere desvalorizar el lugar”

Respondiendo a las denuncias que se suman por desbordes cloacales, reconoció: “Ya me han planteado otros vecinos, como los de la calle Alvarado, que se quejan porque los excrementos salen por las veredas”.

Tanto Ceballos, como la concejal Oviedo, se ofrecieron a participar de las reuniones que vienen realizando y en llevar adelante el reclamo de los vecinos, quienes piden que se lotee el predio y se construyan solo viviendas acordes al perfil que tiene el barrio o que el municipio evalúe la posibilidad de expropiar el predio y que se construya en el lugar una plaza ante el enorme déficit de espacios verdes existente en la localidad.

Al terminar la reunión, ambos recorrieron el predio en cuestión, mientras los vecinos dejaban en claro que los espacios verdes son el conjunto de espacios abiertos de dominio público y uso social, como las plazas, plazoletas, parques, rotondas o boulerares, en clara referencia al constructor, quien días atrás, anunció que su proyecto cuenta con un amplio espacio abierto.